A falta de dos semanas para que acabe el curso escolar, echamos la vista atrás y somos conscientes de que ya ha pasado todo un año escolar lleno de historias y experiencias vividas.
Algunas no han sido muy gratas , ya que en marzo, el dichoso virus cortó nuestras actividades diarias y rutinarias, pero lo que no consiguió cortar fue nuestra ilusión y nuestras ganas de seguir aprendiendo.
En este tercer trimestre, hemos intentado trasladar nuestra aula y nuestra rutina escolar a nuestros hogares. La seño ha sido reemplazada por nuestras mamás y papás, los cuales nos han entregado todas sus fuerzas, constancia y cariño para llevar a cabo esta difícil labor. Pero sin olvidar, que la seño, como las estrellas, no siempre la podíamos ver pero siempre estaba ahí.
Por lo que, en forma de agradecimiento por vuestro esfuerzo y dedicación, os dejo la siguiente presentación. Espero que os guste y la disfrutéis tanto como yo lo he hecho elaborándola.
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